La habitación tenía un baño privado, lo que resulta conveniente, aunque la luz era un poco escasa. La cama, en general, parecía cómoda a primera vista, pero no fue suficiente para un buen descanso.

Las habitaciones son pequeñas y el sonido de las demás habitaciones se filtra fácilmente, restando privacidad. El baño era obsoleto y con mala ventilación, y no se podía abrir la ventana. El desayuno era escaso, con porciones limitadas que no satisfacen adecuadamente. Además, la política de horarios del bar y restaurante es estricta, nos quedamos sin desayunar por bajar solamente diez minutos tarde. Aquella mañana fue bastante frustrante.

El lugar es ideal para disfrutar de una cena bien elaborada. Recomendamos probar las zamburiñas y chuletón, deliciosos y en su punto.

recomiendo este hotel, es total for unas vacaciones en la ciudad,

acogedora habitación, encantadora atención, el acceso al aparcamiento es gratuito, lo que hace más fácil disfrutar de una escapada inolvidable.

Sin problemas

No me gustó el desayuno escaso.

El lugar estaba bien para una escapada corta. La ubicación es práctica, cerca de Santiago, lo que permite explorar la ciudad. La habitación era espaciosa, aunque con un poco de ruido por el personal de limpieza a primera hora. Lo que me gustó más fue el trato que recibimos durante la cena, donde la comida estaba bien preparada y el ambiente era agradable.

casa antigua peculiar, aparcamiento amplio y gratuito, cercanía a Santiago de Compostela

El malentendido al llegar fue frustrante!!! Me parece inaceptable que el acceso sea complicado y oscuro. La falta de información sobre las normas resulta poco acogedora y los ruidos de la limpieza no permiten descansar adecuadamente.

Este lugar me queda perfecto. Tienen wi-fi gratis, restaurante y un bar muy acogedor. En mi primera estancia, el personal me dio el mejor consejo sobre taxis locales. ¡Siempre recomendaré este lugar para una escapada!

Me encantó la decoración rústica del hotel, con paredes de piedra expuesta y vigas de madera que le daban un encanto especial. Las áreas exteriores eran muy agradables para disfrutar del aire fresco con hermosa naturaleza alrededor.

Desearía más opciones de ventilación en las habitaciones.

un lugar perfecto para escapadas románticas. tranquilidad garantizada

habitación limpia, ambiente tranquilo

falta de opciones de cena cercanas

La habitación era acogedora y limpia, lo que hizo que nuestra estancia fuera placentera. Disfrutamos de un desayuno completo y bien servido, aunque notamos que el acceso al hotel podría mejorarse y algunos ruidos externos interfirieron en nuestro descanso. Recomendado para una escapada tranquila.

Una experiencia inolvidable

Disfruté de un ambiente acogedor y tranquilizador, con un personal siempre dispuesto a ayudar. La comida en el restaurante fue excepcional, especialmente la carne. Recomiendo probar el menú del día, ¡no se arrepentirán! Asegúrense de reservar con anticipación.

Un lugar encantador con un ambiente cálido y acogedor. La atención del personal fue excepcional, siempre dispuestos a ayudar y ofrecer recomendaciones útiles. El entorno es precioso y perfecto para disfrutar de la naturaleza, además, el desayuno fue delicioso y variado. Sin embargo, hubo un pequeño incidente con la limpieza relacionada con nuestra mascota, lo que nos dejó un mal sabor de boca. En general, una buena experiencia pero con aspectos que mejorar.

La habitación con mucha humedad, pero la comida era deliciosa.

La decoración en Asador de Roxos Casa Albardonedo es un sueño rústico, vigas de madera expuestas y paredes de piedra que hacen sentir como si estuviera en un cuento de hadas gallego. La comida del restaurante fue como un abrazo cálido al paladar, especialmente resultaron memorables los platos de carne, definitivos para un festín. El acceso al patio fue el lugar ideal para disfrutar de un café mientras los pájaros cantaban en el jardín.

Ruido de limpieza